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Seite 12: Die Geschichte vom kleinen Muck (Historia del pequeño Muck) |
deutscher Text | Texto español |
Der kleine
Muck bedachte nun ernstlich, was er wohl
anfangen könnte, um sich ein Stück
Geld zu verdienen; er hatte zwar ein Stäblein,
das ihm verborgene Schätze anzeigte,
aber wo sollte er gleich einen Platz finden,
wo Gold oder Silber vergraben wäre?
Auch hätte er sich zur Not für
Geld sehen lassen können; aber dazu
war er doch zu stolz. Endlich fiel ihm die
Schnelligkeit seiner Füße ein,
»vielleicht«, dachte er, »können
mir meine Pantoffeln Unterhalt gewähren«,
und er beschloß, sich als Schnelläufer
zu verdingen. Da er aber hoffen durfte,
daß der König dieser Stadt solche
Dienste am besten bezahle, so erfragte er
den Palast. |
Muck se
puso a considerar muy seriamente qué
podría hacer para ganarse alguna moneda.
Por cierto tenía un bastoncillo que
le mostraba tesoros ocultos, pero ¿dónde
encontraría de inmediato un lugar con
o plata enterrados? También en caso de apuro se habría podido exhibir por dinero, pero era demasiado orgulloso para hacerlo. Por fin recordó la velocidad de sus pies, -tal vez- pensó, las babuchas me pueden servir para ganarme la vida- y se decidió ofrecerse como corredor. Como esperaba que el rey de esta ciudad fuera quien mejor recompensara tales servicios, se dirigió al palacio. A la puerta del palacio había un centinela, que le preguntó qué buscaba. Al responder que quería ofrecer sus servicios, le envió a buscar el veedor de esclavos. Expresó a éste su pretensión y le pidió que le ayudara a conseguir un puesto entre los mensajeros reales. El veedor le miró de pies a cabeza y dijo ¿Cómo? ¿Con tus pequenos pies que apenas miden un palmo quieres convertirte en mensajero real? ¡Lárgate de aquí! No estoy para bromear con cualquier loco. El pequeño Muck le aseguró que su petición era más que seria y que estaba dispuesto a competir con el más rápido de los corredores. El asunto le pareció absurdo al veedor y le ordenó prepararse para una carrera aquella misma tarde, lo llevó a la cocina y se ocupó de que le sirviesen suficiente comida y bebida. El mismo se presentó ante el rey y le habló del pequeño Muck y de su ofrecimiento. El rey era hombre burlón, por lo que le agradó que el veedor de esclavos hubiera retenido al personajillo para divertirse, y le mandó organizar la carrera en una gran pradera detrás del palacio, de modo que pudiese ser vista cómodamente por toda su corte. Otra vez le encargó que mientras tanto se tratara al enano con gran atención. El rey contó a sus príncipes y princesas que esa tarde iban a tener diversión, éstos se lo contaron a sus servidores, y cuando llegó la tarde estaban impacientes, y todo el que tenía pies se apresuró a ir a la pradera donde se habían dispuesto tribunas para ver correr al enano fanfarrón. |
Vokabular | |
bedenken = considerar | |
zur Not = en caso de apuro | |
der Schnellläufer (neue Rechtschreibung) = el corredor | |
die Wache = el centinela | |
der Aufseher der Sklaven = el veedor de esclavos | |
das Anliegen vortragen = exponer la petición | |
der königliche Bote = el mensajero real | |
die Spanne = el palmo | |
versichern = asegurar | |
vollkommen ernst sein = ser más que serio | |
lächerlich = absurdo | |
die Wiese = la pradera | |
der Hofstaat = la corte |
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